- El puente cayo tras vencer con el peso de un camión cargado de cerdos. El pueblo alavés lo recupera con el mural de Irantzu Lekue en el marco del Atauri art
Del viejo puente de Atauri apenas quedan unas fotos. Del estratégico paso existen referencias escritas desde el año 1730. Versan sobre un puente de madera, que servía para cruzar, de orilla a orilla el rio Berrón. Unía, tejía el pueblo, a las faldas de la Peña “las cinco”. Fue en 1737 cuando el puente pasó de la madera a la robusta piedra. Una cambio de calado para el pueblo. Tanto que se convirtió en el elemento central de algunas de las fotos de esos días señalados en los que “el señor fotógrafo” acudía al pueblo.
Una de esas instantáneas, datada en el año 1890, es la que la artista vasca Irantzu Lekue ha tomado como referencia para elaborar, junto con los vecinos de Atauri, el mural participativo Zubi bizia. Un mural que une dos conceptos importantes para el pueblo “el puente que quebró al paso de un camión de cerdos a principios de la década de los 90 y la vida, la cultura, lo que queremos para nuestro enclave, para la montaña alavesa”, explica Xabier Oribe. ”Es curiosa la historia porque se trataba de la última piara de cerdos que quedaba en Atauri y con ese viaje quitaban los cerdos para siempre. El último viaje de los cerdos, nos dejó sin nuestro puente”, explica.
El proceso participativo para la elaboración del mural ha sido más sencillo que en otros murales ya que según explica Irantzu Lekue “en esta ocasión el pueblo tenía muy claro lo que quería. “Había acuerdo total”, explica. Junto con los vecinos de Atauri, pueblo de 25 habitantes y en el que han colaborado la mayoría en su realización se pusieron manos a la obra. Así han logrado establecer además nuevas relaciones y nexos de unión entre los habitantes de la zona con diferentes técnicas de participación ciudadana aplicadas al arte, “estamos muy contentas con el resultado y lo más importante: estamos reforzando que el arte sea el vehículo para reforzar los lazos de la comunidad: de las vecinas y vecinos de mendialdea».
El mural finalmente ha adoptado elementos pictóricos propios del entorno que rodea al puente pero también a la cultura, en un claro guiño al Atauri art”, explica Lekue a quien le resulta especialmente interesante desarrollar proyectos artísticos fuera de los núcleos poblacionales grandes «donde construimos la cultura de lo pequeño a lo grande, de abajo hacia arriba. Y es eso lo que estamos haciendo, y esto hacen en Atauri. Utilizar el arte para crear comunidad e introducirlo en la vida diaria de las personas. En definitiva, mejorar el entorno para mejorar vidas».
En este proyecto Irantzu Lekue ha tenido que desafiar también algunos problemas propios del lugar como la climatología adversa y la humedad del lugar. «Se trata de un lugar húmedo y en cuesta. Por ello, hemos dado un tratamiento especial para sanearlo y que la pintura se fije como debe».
Con la inauguración del mural de Irantzu Lekue ha comenzado la sexta edición del Festival Atauri Art .